viernes, 1 de junio de 2012

En medio de las tinieblas...

¿Cuántas tinieblas rodean tu vida? ¿Muchas? ¿Una sola, pero intensa?

Eleva a Dios tu oración, deja que Él te acompañe y llore contigo. El paso del tiempo te hará ver que fueron justamente esos años los que más te ayudaron a crecer y a hacerte fuerte interiormente. Vivirlos alejados de Dios y sin orar es como querer salvarse en una tormenta en el mar sin salvavidas. Pero quien los vive con Dios, dialogándolo con Él, logrará paz interior en esta vida y la esperanza de un día disfrutar de su presencia.