![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj7YohL96X3bvITeSricSN1dvGyLaprda5BjrChDT6tA3U9w6UmgFJotsEqjCeckXTl72l6_BYxUrjYqdh9HNFtsRo7hO_4t9Z0W9Vv4VmVweA6ramRB5zjU55Tl__1CFmm6v9VHUI8h5kh/s1600/Nacimiento-Gerard_van_Honthorst_001.jpg)
«La señal de Dios es su humildad. La señal de Dios es que Él se hace
pequeño; se convierte en niño; se deja tocar y pide nuestro amor. Cuánto
desearíamos, nosotros, los hombres, un signo diferente, imponente, irrefutable
del poder de Dios y su grandeza. Pero su señal nos invita a la fe y al amor, y
por eso nos da esperanza: Dios es así. Él tiene el poder y es la Bondad».
BENEDICTO XVI