jueves, 18 de junio de 2015

VIVIR EL HOY



Alguien dijo que el día de hoy es una maravillosa oportunidad flanqueada, como Jesús en la cruz, por dos ladrones: ¡ayer y mañana! Hoy, este día, es una de las cosas más valiosas de todas las que se te han concedido. Puedes lograr casi cualquier cosa si no te preocupas sino por el día de hoy. Cada mañana mira hacia arriba, toma la mano de Jesús y di: «Hoy confiaré en Ti. Hoy, con Tu ayuda, caminaré paso a paso a Tu lado, y me guardarás en completa paz». Hoy puedes hacer algunas cosas que llevas mucho tiempo posponiendo. Ya no las puedes hacer ayer, y tal vez mañana no tengas oportunidad de hacerlas. ¡Pero el día de hoy es todo tuyo! Hoy puedes ser la clase de persona que soñaste con llegar a ser.
Todos tus ayeres están con Dios, y ninguna decepción que te hayan causado se debe arrastrar hasta el día de hoy. Mañana aún no ha nacido, y no le debemos pedir nada prestado. ¡Hoy está lleno de magníficas oportunidades y preñado de grandes posibilidades! Es el mañana dorado con el que ayer soñabas. Virginia Brandt Berg (1886–1968)
El día de ayer se esfumó. Mañana aún no ha llegado. No tenemos sino el día de hoy. Empecemos.” Madre Teresa (1910–1997)
A mi juicio, uno de los aspectos más trágicos de la naturaleza humana es nuestra tendencia a dejar el goce de la vida para más adelante. Todos soñamos con un mágico jardín más allá del horizonte en vez de disfrutar de las rosas que florecen frente a nuestra ventana.Dale Carnegie (1888–1955)

Ser como las abejas



1.- Sé como las abejas. Tienen un bello oficio. Visitan las flores del jardín y se llevan el polen de las flores para con él fecundar otras semillas. Busca lo bueno que hay en la vida y fecunda con ello tu vida y la vida de los demás.
2.- Sé como las abejas. Tienen un bello oficio. Visitan las rosas y no se fijan en las espinas. Sólo buscan la miel que hay en ellas. ¿Por qué andar buscando siempre lo malo que hay en la vida? Si fuésemos abejas dejaríamos de lado las espinas y contemplaríamos las rosas.
3.- Sé como las abejas. Tienen un bello oficio. Recogen la miel que hay en cada flor del jardín. En las flores grandes y en las chicas. En las muy bellas y en las que no lo son tanto. Es que para quien busca siempre hay mucho de bueno que encontrar en la vida de cada persona.
4.- Sé como las abejas. Tienen un bello oficio. Repasan las flores, las del jardín y las del monte. Y con la miel que encuentran hacen luego ellas un rico panal. Cada día debiera elaborar mi panal con toda la bondad que descubro en los míos y en los de afuera.
5.- Sé como las abejas. Tienen un bello oficio. Elaboran un rico panal de miel suficiente para ellas y la mayor parte te la regalan a ti para que endulces tu vida. ¿Por qué quedarme con mis alegrías si son suficientes para mí y para compartirlas con los demás?
6.- Sé como las abejas. Tienen un bello oficio. Son fecundas y alimentan con su miel a los demás. A los hijos no basta darles la vida. Hay que darles luego la miel, ese gusto y ese sabor por la vida. Que amen y sientan el gusto de vivir.
7.- Sé como las abejas. Tienen un bello oficio. Trabajan todas para todas. Y todo lo comparten. Nadie se hace dueña de la miel de su trabajo. Hoy puedo compartir muchas cosas con los demás. Sé que dando de lo mío, disfruto yo y pueden vivir otros muchos.

No mates la alegría



1.- No mates la alegría que hay hoy en ti, recordando las penas de ayer. Aquellas penas ya las sufriste. Hoy goza de la alegría que la vida te regala este nuevo día que es diferente al de ayer.
2.- No mates la alegría que hay hoy en ti, pensando en los malos días que puedan venirte. El sol que hoy te calienta no volverá. Pero hoy necesita calentar y fecundar las semillas de la vida que llevas dentro. El futuro vívelo mañana, pero hoy vive el presente.
3.- No mates la alegría que hay hoy en ti, con recuerdos del pasado. La vida no se vive más que una vez. ¿Por qué te empeñas en vivir dos veces los días sin luz? ¿No te das cuenta de que la luz ya volvió a lucir dentro de ti?
4.- No mates la alegría que hay hoy en ti, porque te has vuelto a reconciliar y reencontrar con Dios en el Sacramento de la Penitencia. ¿Por qué seguir recordando los pecados de ayer, que Dios ya tiene olvidados desde que te los perdonó?
5.- No mates la alegría que hay hoy en ti, con las malas noticias que te han dado. ¿Por qué no esperas un poco y miras a tu alrededor? ¿No ves que también hoy hay buenas noticias para ti en la vida?
6.- No mates la alegría que hay hoy en ti, porque las alegrías de hoy son nuevas, diferentes a las de ayer y a las de mañana. Si en vez de vivir las alegrías de hoy estás pensando en las de mañana, mañana pensarás en las de pasado mañana y así nunca vivirás la única alegría posible de tu vida, la de hoy.
7.- No mates la alegría que hay hoy en ti, pero tampoco mates la alegría que hay en los demás. Si has de decirles algo desagradable y no es de urgencia, espera a otro día. Déjales que sean felices hoy.

sábado, 13 de junio de 2015

Recomendaciones para este verano



  1. Por la mañana, cuando vayas caminando por la playa fíjate en el reflejo del sol en el agua, piensa en lo que más te guste en la vida y siéntete feliz.
  2. Intenta usar todos los nuevos términos aprendidos este año: cuantas más cosas digas, más cosas puedas imaginar y más cosas puedas pensar, más libre te sentirás.
  3. Lee todo lo que puedas. Pero no porque tienes que hacerlo. Lee porque el verano inspira sueños y aventuras y leyendo te sentirás como las golondrinas al vuelo. Lee porque es la mejor forma de rebelión que tienes.
  4. Evita todas las cosas, situaciones y personas que te influyan negativamente: Busca las situaciones y la buena compañía de los amigos que te enriquezcan, que te entiendan y que te aprecien por lo que eres.
  5. Si te sientes triste o asustado, no te preocupes: el verano, como todas las cosas maravillosas, nos puede dar algún que otro problema. Intenta escribir un diario donde plasmes tus sentimientos.
  6. Baila. Quítate la vergüenza. En la pista de baile o en tu habitación. El verano es un festival y sería absurdo no formar parte de él.
  7. Al menos una vez en tu vida tienes que ver el amanecer de un nuevo día. Permanece en silencio y respira. Cierra los ojos y siéntete agradecido.
  8. Haz un montón de deporte.
  9. Si encuentras a una persona que te gusta mucho, díselo con total sinceridad. No importa si él/ella termina por no entenderte. Si no lo hace es que él/ella no iba a formar parte de tu destino. De lo contrario, el verano 2015 será la gran oportunidad para caminar juntos. (Si esto sale mal, vuelve al paso 8).
  10. Recuerda los apuntes de nuestras clases.
  11. Sé alegre como el sol e indomable como el mar.
  12. No digas palabras mal sonantes y sé siempre educado y amable.
  13. Si vas a ver películas, hazlo en versión original para mejorar tus habilidades lingüísticas y tu capacidad de soñar. No dejes que la película acabe con los créditos; re-vívela mientras dure el verano.
  14. Durante el día o en la noche, sueña en cómo puede y debe ser tu vida. Mientras dure el verano, reúne toda la fuerza que necesites para no renunciar a eso que quieres y haz todo lo posible para perseguir ese sueño.
  15. Sé bueno. 
Cesare Cata

viernes, 12 de junio de 2015

Dios protege al que confía en Él



"A mis ovejas les doy la vida eterna; 
nadie las arrancará de la mano de mi padre" 
Jesucristo

Tú que habitas al amparo del Altísimo, 
a la sombra del Todopoderoso,
dile al Señor: mi amparo, mi refugio en Ti, mi Dios, 
yo pongo mi confianza.
El te libra del lazo del cazador que busca destruirte;
te cubre con sus alas y será su plumaje tu refugio.
No temerás los miedos de la noche 
ni la flecha disparada de día,
ni la peste que avanza en las tinieblas, 
ni la plaga que azota a pleno sol.
Aunque caigan mil hombres a tu lado 
y diez mil a tu diestra,
tú permaneces fuera de peligro; 
su lealtad te escuda y te protege.
Basta que tengas tus ojos abiertos 
y verás el castigo del impío,
tú que dices: "Mi amparo es el Señor" 
y que haces del Altísimo tu asilo.
No podrá la desgracia dominarte 
ni la plaga acercarse a tu morada,
pues ha dado a sus ángeles 
la orden de protegerte en todos tus caminos
En sus manos te habrán de sostener 
para que no tropiece tu pie en alguna piedra;
andarás sobre víboras y leones 
y pisarás cachorros y dragones.
"Pues a mí se acogió, lo libraré, lo protegeré, 
pues mi Nombre conoció.
Me llamará, yo le responderé 
y estaré con él en la desgracia.
Lo salvaré y lo enalteceré. 
Lo saciaré de días numerosos
y haré que pueda ver mi salvación".
 SALMO 91 (90)
ORACIÓN DE PROTECCION